¡Tu nuevo hogar te está esperando en Carlos V, Móstoles!

Imagínate despertando cada mañana en un luminoso piso de tres dormitorios, donde hay espacio suficiente para que todos encuentren su lugar: para soñar, para estudiar, para compartir. Un salón amplio que invita a reunir amigos y familia, repleto de luz, que se funde con la risa y la conversación. Y cuando cocines, lo harás en una cocina amueblada, lista para tus recetas, tus risas, tus planes. El baño, reluciente, hace que todo el día empiece con un abanico de posibilidades. Y para esos momentos de calma, una terraza con vistas, donde el café de la mañana sabe mejor, y el atardecer promete sosiego.

Este hogar es un primero con ascensor: fácil acceso, sin cargas que entorpezcan. Ya está listo para entrar a vivir: cuenta con calefacción central que te arropa en los días fríos, suelos de gres fáciles de limpiar y mantener, y ventanas de aluminio modernas que aíslan ruido y clima.

Pero más allá de la casa, está el entorno que hace que todo cobre sentido. Se encuentra en un recinto cerrado con jardines, ese espacio verde que te regala aire puro, tranquilidad, vistas amables. Donde los niños pueden jugar, los mayores descansar, y tú simplemente desconectar.

Comunicación insuperable, para moverte sin esfuerzo:

Autobús urbano justo a la puerta: líneas 4 y 1, entre otras, conectando con hospitales, centros urbanos y todos los servicios cercanos. 

Línea interurbana y nocturna N503, que te lleva directamente a Madrid (Príncipe Pío), ideal para quienes trabajan o disfrutan de la ciudad. 

Y si prefieres el tren, la línea C-5 de Renfe Cercanías con parada en Móstoles El Soto, accesible en pocos minutos. 

Metro: muy cerca la estación de la línea 12 (MetroSur) lo que te conecta con otros municipios del sur metropolitano. 

Si buscas un hogar donde cada rincón te abrace, donde la comodidad no sea un lujo sino parte del día a día; si valoras estar bien comunicado sin renunciar al silencio, a la paz de un jardín, a la luz de cada amanecer… Este piso es para ti.

Hazlo tuyo. Ven, recorre sus espacios, y siente que estás donde perteneces.